Me gustaría encontrar la palabra que mejor describa la Concentración de Reclinados del pasado fin de semana en Barcelona. Y es difícil, porque se me ocurren unas cuantas, todas ellas testigo de un evento magnífico en un ambiente formidable entre amigos.

Foto de grupo frente a la fábrica de Anís del Mono, en Badalona.
Para mí, esa palabra sería emocionante.
Hay que reconocer que no teníamos todas las cartas a favor; los acontecimientos de las últimas semanas generaban algunas dudas. En el momento de ir a recoger las furgonetas de alquiler para llevar las reclinadas de Madrid a Barcelona, no eran las que habíamos pedido. A Marta y Chemi les falló el alojamiento, no 24 horas antes, sino en el momento de llegar a Barcelona. Pero la infinita generosidad de Aína y Ricard resolvieron el incidente de la mejor forma imaginable, trabando al tiempo una gran amistad. Y el que escribe, totalmente indispuesto por una fuerte indigestión a sólo unas horas de partir hacia Barcelona, se tuvo que llevar los pantalones marrones por si acaso.
El resultado, sin embargo, fue -y creo que hablo en nombre de todos todos- mucho mejor de lo que cualquiera habríamos esperado. Todos hemos conocido caras nuevas, hecho nuevos amigos, y pedaleado en muy divertida compañía por toda Barcelona. Una ciudad preciosa y muy bien preparada para ser atravesada en bicicleta, aunque moverse en un grupo tan grande no deja de plantear complicaciones. No quiero insistir en elogiar más lo que ya hemos repetido todos unas cuantas veces, pero nos ha sorprendido el increíble ambiente que ha envuelto ésta, la Octava Concentración de Reclinados de Iberia.
Nos quedamos con un dulce sabor de boca que espero este álbum de fotos, creado con la participación de todos, mantenga en el recuerdo. En esta ocasión, un servidor no ha estado muy concentrado en registrar material gráfico, pero a sabiendas de que otros, como Chemi y algunos más, ya están haciendo de ello una buena labor que reflejaremos aquí en cuanto esté publicada.
VÍDEOS DE LA CONCENTRACIÓN
Gracias, Chemi y Jaume.
No quiero despedirme sin agradecer a todos vuestra colaboración para que este evento haya sido un éxito para recordar. A Luis Manuel, por haberse tomado la organización como un asunto personal e intensamente trabajado, y cuyos frutos se han visto aquí. A Ricard, que contribuyó a dibujar el trazado por Barcelona, y a su compañera Aína, que han sido tan amables de acoger a Chemi y Marta durante toda su estancia. A Josep, que se encargó de organizar la divertida ruta y comida del sábado en El Masnou. A Luis y a Thoeni, quienes se han tragado todos los kilómetros de carretera para transportar los trikes de buena parte del grupo. A mi querida Lola (quien me faltó en Barcelona), porque sí y por sugerirme que fuéramos a cenar a la fábrica de cervezas Moritz, un escenario perfecto para afianzar amistades. A todos los que habéis hecho por venir a Barcelona, de muy cerca y de muy lejos, haciendo un gran esfuerzo en algunos casos. Y también a los que no habéis podido venir por las dificultades que un viaje así entraña, pero que nos habéis acompañado en espíritu y habríais estado aquí de haber podido hacerlo.
Y ahora queda ir pensando en la próxima…. ¿no?
¡Qué envidia! A ver si yo puedo asistir a la próxima y contribuyo como fotógrafo.
Pues será un placer que te incorpores al grupo, Chema… para nosotros y para ti. Saludos!!
Vaya, se me ha pasado, y encima fuisteis a Masnou donde tengo una casa. Que desastre soy, lo raro es que no recibiera nada por Facebook, aunque si que hace tiempo recibi un mensaje, pero esperaba haber recibido algo más.
Bueno, la próxima será.
Qué pena, Benito… envié un recordatorio a través del newsletter para que no se le pasara a nadie, pero no ha funcionado… Así que en la próxima te vas a tener que desplazar!
Y encima, ese camino por la playa lo hacía mucho para ir Barcelona desde Masnou.
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